Artículos: Oceanía

Algunos lo ven como un contrapeso a la OTAN. Otros lo llaman Club para dictadores. Algunos lo consideran una tapadera para la hegemonía china y/o rusa con el potencial de convertirse en una “OPEP con misiles nucleares”.

Este examen del peligro en expansión que emana de Beijing muestra que el Pentágono no sólo comprende las implicaciones del desafío chino a la primacía americana en Asia, sino que también es lo bastante resuelto como para plantear a Beijing las preocupaciones de Washington.

Parece ser que se debe atribuir a Teng Hsiao- ping el sistema de numeración de las generaciones, lo que resulta útil para cualquier estudioso de la política china , a modo de guía para seguir la historia política de China posterior a la implantación del régimen comunista en China desde 1949.

Tokio ha quedado cada vez más aislado y ha descubierto que los vínculos cercanos con Washington son cada vez más importantes. China y Japón son enemigos históricos que tradicionalmente han combatido por la supremacía regional.

El principal dilema a la hora de persuadir a Corea del Norte de ponerse seria con las negociaciones es la falta de voluntad por parte de China y Corea del Sur a la hora de incrementar la presión sobre Pyongyang.

Mao Zedong lleva 30 años muerto, pero sigue proyectando su alargada sombra sobre el estado que fundó, la República Popular China. Tanto su cadáver como un gigantesco retrato suyo siguen ocupando un sitio de honor en la Plaza Tiananmen en el centro de Pekín.

China lleva implicada en África desde los años sesenta, apoyando a regímenes criminales y grupos revolucionarios en concordancia con una temática 'antiimperialista'. Las relaciones de Beijing con Sudán escalaron en los años 90 con la explotación de enormes reservas petroleras. Ha invertido alrededor de 10 billones de dólares en Sudán.

Amid festering concerns about China's burgeoning global power, Beijing has set its sights on expanding its influence in Africa.

El régimen de China ya ha cambiado internet, pero ¿puede internet cambiar al régimen?

Unless Beijing makes some significant contribution to world peace, nonproliferation, human rights, or its massive trade surplus with the United States by April, President Hu should not expect a warm welcome in Washington.