Los Roosevelt galos

por Juan F. Carmona y Choussat, 26 de junio de 2012

(Publicado en La Gaceta, 25 de junio de 2012)
 
La primera dama francesa, que se estrenó twiteando contra la excompañera de su pareja, escribe en Paris-Match. Dedicó su primer artículo tras la elección a Eleanor Roosevelt. Hollande lee sobre su marido Franklin y promete aplicar su política keynesiana. El modelo son los Roosevelt. Para empezar le ha declarado la guerra – económica - a Alemania.
 
El papel de FDR en la superación de la crisis del 29 forma parte del mito. Hollande parece creer en él. Pero no es seguro que su gusto político-literario se complete con conocimientos. Antaño, Reagan, considerado un cowboy iletrado, leyó el resumen de “Camino de servidumbre” de Hayek en el Reader’s Digest. En cuanto a la dama de hierro, que sacó con Reagan a Occidente de la estanflación de los 70 tras ser intervenida Inglaterra por el FMI, leía originales. En la elección al partido conservador que le llevaría a Downing Street habló tras un orador más recatado. Subió al estrado y sacando del bolso el tomo de la “Constitución de la libertad”, también de Hayek, golpeó con él la mesa exclamando: “Esto es en lo que creemos”.
 
Los Hollande disputan hoy ese exitoso modelo en nombre del New Deal rooseveltiano.
 
No está Europa para ficciones malignas –expresión de Vargas Llosa – como la apelación mágica a crecer. Conviene aportar más certezas a la solución de que la mancha de deuda se quita con más deuda. Las pide el economista de Stanford John Taylor, menos mediático que Krugman, más fiable. Propone huir de la arbitrariedad, defiende el carácter predecible del estado de derecho: saber a qué atenerse.
 
Las ficciones demagógicas no resolverán la crisis. Lo hará atender al cumplimiento del Derecho, a la estabilidad monetaria y a una regulación que no castigue a emprendedores ni ahorradores. Esto propugnan quienes de verdad leyeron y prescinden de presumir de ello.