Implicaciones de la misión en Afganistán para las FAS españolas

 

El Consejo de Ministros, por Acuerdo de 27 de diciembre de 2001, autorizó la participación de unidades militares españolas en la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (International Security Assistance Force, ISAF) en apoyo del Gobierno interino afgano. Las primeras unidades españolas llegaron a Afganistán a finales de enero de 2002. El contingente, con una media de 350 efectivos, estaba formado por unidades de mando, comunicaciones y apoyo logístico, ingenieros, un equipo de desactivación de explosivos y otro de apoyo al despliegue aéreo. Este contingente estuvo desplegado en Kabul y alrededores.

 

El contingente mantuvo su entidad hasta enero de 2003, fecha en la que se produjo una reducción como consecuencia de la participación española en la misión en Irak, quedando básicamente la unidad de ingenieros y otra de apoyo al despliegue aéreo, con un total de 130 efectivos. Esta composición se mantuvo constante hasta el 2 de julio de 2004, fecha en que se decidió incrementar nuestra participación hasta un máximo de 540 efectivos para atender un hospital de campaña en Kabul, complementado por elementos de transporte, cuatro helicópteros, un destacamento del Ejército del Aire en Manas (Kirguizistán) y una unidad de apoyo y protección. En el total de los 540 efectivos estaba contabilizado el personal perteneciente al Eurocuerpo que en ese momento lideraba el Cuartel General de ISAF (unos 70 efectivos).

 

El Consejo de Ministros, por Acuerdo de 2 de julio de 2004, autorizó, por una duración máxima de 90 días, el despliegue de un batallón de Infantería, con un máximo de 500 efectivos, para apoyar el proceso electoral en Afganistán. El batallón desplegó en Mazar-e-Sharif desde primeros de septiembre hasta finales de noviembre de 2004 con la misión principal de apoyar a los Equipos de Reconstrucción Provincial de ISAF en la zona norte del país. Asimismo, la unidad de 4 helicópteros, que se encontraba en Kabul en apoyo al hospital desplegado en esa ciudad, modificó su misión y zona de despliegue, desplazándose también a Mazar-e-Sharif, para apoyar al batallón español mediante el transporte, reconocimiento y evacuación médica.

 

El 21 de febrero de 2005, el ministro de Defensa anunció la intención del Gobierno de cambiar el despliegue de unidades militares españolas en Kabul para liderar una Base de Apoyo Avanzada en Herat, al oeste del país, y un Equipo de Reconstrucción Provincial. En mayo de 2005, se inició el despliegue del contingente español en apoyo a la expansión de ISAF al oeste de Afganistán, trasladándose parte de personal de Kabul a Herat, para constituir la Base de Apoyo Avanzada que alcanzó la capacidad operativa plena a lo largo del mes de junio cuando se encuentran desplegadas las siguientes unidades españolas: un hospital ROLE 2, dos helicópteros de evacuación sanitaria, tres helicópteros de transporte, una compañía de reacción rápida, personal de gestión del aeropuerto de Herat y un elemento de apoyo nacional.

 

En agosto de 2005, España se hizo cargo del Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT) de Qala i Naw. La parte militar del PRT (compuesta por 120 efectivos) alcanzó su capacidad operativa plena el 19 de agosto de 2005. El 2 de septiembre de 2005 empezó el despliegue de la parte civil, en el que se combinan personal diplomático, de cooperación y de empresas españolas como TRAGSA (empresa pública colaboradora con AECI).

 

Además, Oficiales españoles se encuentran realizando diversas funciones en el Mando Regional Oeste (liderado por Italia) y en el Cuartel General de la operación en Kabul.

 

El sostenimiento de la operación se realiza a través de un destacamento del Ejército del aire desplegado en la Base Aérea de Manás (Kirguistan) que cuenta con diverso personal y un avión C-130 “Hércules”.

 

El 22 de junio de 2005, el ministro de Defensa presentó, ante la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados, la necesidad de apoyar a las elecciones con el despliegue de un batallón de infantería. España desplegó este batallón de apoyo a las elecciones parlamentarias (500 hombres) en la zona de Herat. Su despliegue se inició el día 12 de julio y se replegó a principios de octubre de 2005.

 

El aumento de las acciones militares en la zona provocó que el Jefe de Estado Mayor de la Defensa solicitara un aumento de efectivos con el propósito de reforzar el contingente en los siguientes aspectos:

1.                  Reforzar el Equipo Provincial de Reconstrucción de Qala-i-Naw para cometidos de seguridad.

2.                  Desplegar en Herat un avión de transporte para cometidos de evacuación y transporte interior.

3.                  Reforzar la Compañía de Reacción Rápida de Herat para incrementar su capacidad de refuerzo a los cuatro equipos provinciales de reconstrucción a los que atiende en la zona oeste.

4.                  Incrementar nuestra presencia en el Cuartel General del Mando Oeste.

 

El Gobierno, tras la preceptiva autorización parlamentaria, mediante Acuerdo de Consejo de Ministros de 12 de mayo de 2006, decidió reforzar sus unidades autorizando el aumento de 150 efectivos adicionales al contingente de 540 autorizado hasta ese momento.

 

Dentro del Plan de Operaciones 10302 de ISAF, se contempla la creación de unidades aliadas especializadas en la instrucción del Ejército Nacional afgano. Estas unidades, denominadas “Equipos Operativos de Asesoramiento y Enlace” (Operational Mentoring and Liaison Team, OMLT), se unen a la unidad instruida, de entidad batallón, durante todo el periodo de instrucción hasta que dicha unidad adquiere una operatividad contrastada.

 

El 25 de septiembre de 2007, el Ministro de Defensa solicitó de la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados la autorización para el envío de dos Equipos Operativos de Asesoramiento y Enlace, con un contingente de 52 personas, con el cometido de instruir y formar al Grupo Logístico y a la Unidad de Servicios de Base de la Brigada número 1 del 207 Cuerpo de Ejército afgano, con base en Herat. En este grupo se incluye, además del personal instructor propiamente dicho, a otros efectivos de apoyo. El número máximo de efectivos autorizado es de 52, que se añaden al ya aprobado de 690 efectivos.

 

En marzo de 2008, España aumentó a once los agentes destinados al contingente de la Misión Europea de Policía (EUPOL).

 

En junio de 2009 se autorizó un aumento del número de instructores (12), un equipo de seguridad para el aeropuerto de Kabul que se incorporaron el primero de octubre y que estarán por seis meses y un batallón electoral desplegado a finales de julio de 450 efectivos que volverán una vez se sepa si habrá segunda vuelta en los comicios.

 

Finalmente el pasado 26 de septiembre el gobierno aprobó el despliegue de otros 220 efectivos que serán destinado a la región de Bagdhis para incrementar la protección de un territorio bastante inhóspito donde se han desarrollado numerosos ataques talibanes en los últimos meses. Esto implica que a finales del ejercicio suponiendo el regreso del batallón electoral y el despliegue de los 220 efectivos, España tendrá desplegados en la zona 1.082 efectivos, de los cuales en Bagdhis habrá 464 efectivos.

 

Desde el comienzo de la operación se han desplegado más de 12.500 efectivos; alrededor de un 10% de nuestras fuerzas armadas han pasado por operaciones internacionales. Desde España y con el apoyo de la base de Manas se han transportado más de 5 millones de kilogramos de material; más de 500 vuelos se han efectuado desde España a la zona de operaciones

 

 

España ha comprometido 220 millones de Euros desde el comienzo del conflicto para tareas de reconstrucción; para los años 2010 a 2012 unos 40 millones de Euros anuales se destinarán a tareas de reconstrucción, apoyo a la gobernabilidad y educación.

 

En la provincia de Bagdhis, casi todas las acciones de esta naturaleza se han desarrollado en la ciudad de Qala i Naw, donde se encuentran las tropas españolas; apenas se han realizado actividades de reconstrucción en la zona norte de la provincia; a partir del distrito de Muqur, la presencia de las tropas españolas es nula. Los talibanes se han hecho fuertes en los santuarios de Bala Murghab y Ghormarch y desde ahí impiden toda presencia de ISAF en dicha zona.

 

En la zona de Qala i Naw se han construido unos 150 kilómetros de carreteras, la nueva pista y terminal del aeropuerto y se han suministrado plantas potabilizadores que atienden a una población de 40.000 personas y suministro eléctrico para un barrio de la ciudad; asimismo se han reconstruido diversas escuelas en las que se imparten clases a unos 30.000 niños y mujeres.

 

 

Con el fin de dar una idea de la evolución del conflicto afgano en los últimos años, se incorporan unos mapas con unos datos básicos sobre evolución del número de ataques talibanes por zonas y de la presencia de talibanes en el territorio.

 

Situación en diciembre de 2003

 

 

 

Situación en junio de 2007

 

 

 

 

Situación agosto 2009

 

 

Situación 2003

 

Las tropas españolas han perdido 23 de sus hombres en Afganistán, 17 en el incidente del helicóptero Cougar, 6 en ataques talibanes y 2 más; uno por un ataque al corazón y otro en un accidente con un vehículo, más un intérprete afgano.

 

 Los principales ataques e incidentes armados en los que tropas españolas se han visto envueltos han sido:

 

·                    8 de julio de 2006. El soldado Hernández murió al estallar un artefacto a distancia durante una patrulla en Farah, otros cuatro miembros españoles de la patrulla resultaron heridos.

·                    21 de febrero de 2007. La soldado Rodríguez falleció al estallar una mina al pasar en una ambulancia blindada cerca de Shindand en la provincia de Herat. Un alférez y un cabo resultaron heridos.

·                    10 de agosto de 2007. Una patrulla conjunta afgano española de unos 80 efectivos fue atacada en la ruta entre Bala Murghab y Ghormac, en la provincia de Bagdhis, fallecieron 3 soldados afganis.

·                    24 de septiembre de 2009. Dos soldados resultaron muertos y seis heridos en el interior de un BMR al explotar un artefacto improvisado IED cerca de Shewan, en la provincia de Farah.

·                    11 de octubre de 2008. tropas españolas que escoltaban a un convoy de alimentos mataron a dos atacantes en la provincia de Bagdhis.

·                    9 de noviembre de 2008. Un atentado suicida mato a un sargento y a un cabo primero español; otros cuatro militares resultaron heridos

·                    1 de diciembre de 2008. Un soldado afgano resultó muerto y dos heridos al no atender las indicaciones de unos soldados españoles al sur de Herat.

·                    2 de mayo de 2009. Tropas españolas repelieron dos ataques talibanes en la zona de Herat, en un combate que duró 4 horas; gracias al apoyo aéreo americano se solventó la situación sin heridos.

·                    7 de junio de 2009. En la zona de Siahvashan, al sur de Herat, los talibanes atacaron un convoy español; el enfrentamiento se saldó sin victimas en ambos bandos.

·                    11 de agosto de 2009; la base española de Herat fue atacada con seis cohetes sin daños de consideración.

·                    16 de agosto de 2009. otra media docena de cohetes cayeron en la base de Herat, sin incidentes,

·                    3 de septiembre de 2009. Tropas españolas matan a 13 talibanes en el paso de Sabzak, en Bagdhis tras seis horas de enfrentamiento. Gracias al apoyo aéreo italiano con helicópteros Manguita se solventó la situación.

 

España junto a otros países forma parte de las actividades de formación del Ejército afgano; por una parte en Camp Stone, y bajo dirección americana se forma la brigada número 1 del 207 Cuerpo de Ejército, que hasta que termina su periodo de formación actúa conjuntamente con las fuerzas de ISAF. Por otra parte España suscribió un acuerdo con el gobierno afgano para patrocinar un batallón en la zona de Bagdhis, donde no existía presencia militar afgana; a dicho fin se está construyendo un cuartel en Qala i Naw y se le dota del equipamiento y entrenamiento. En la actualidad más del 80% de las misiones españolas en la zona se realizan conjuntamente con tropas afganas: En la actualidad operan desde el PRT unos 150 soldados afganos y unos 250 españoles a los que se unirán próximamente el resto del contingente recientemente aprobado.

 

 

El coste de las misiones se ha mantenido constante en función del número de efectivos; así los costes por unidad entre Bosnia, Irak o Líbano no difieren en grandes cifras. Afganistán es sin duda el mayor reto militar, logístico y económico de nuestras Fuerzas Armadas en los últimos setenta años.

El cuadro anterior refleja la evolución del coste de las misiones españolas en el exterior. Como puede observarse los costes se han ido incrementando de forma significativa, a la vez que se reducían los presupuestos de Defensa. Los gastos en los años 2009 y probablemente en 2010 se van a disparar de forma notable básicamente por el conflicto en Afganistán, cuya logística y las inversiones asociadas son mucho más onerosas que el resto de misiones. Sin en 2008, las tropas en Afganistán suponían el 26% del total y absorbían en 48% de los costes de las misiones en el exterior; en el año 2009, las tropas en Afganistán supondrán un tercio, aproximadamente de nuestros efectivos desplegados y el 60% del coste total. Así Afganistán costará a las arcas del ministerio de  Defensa en 2009, 370 millones de Euros. Este incremento se debe a las nuevas inversiones; transporte, despliegue del batallón electoral y del contingente que se hará cargo del aeropuerto de Kabul y el nuevo despliegue acordado de 220 efectivos. El coste en 2009 respecto de 2008 se incrementó en un 15%.

 

Para 2010, una vez estén plenamente desplegados los más de mil hombres, los costes llegarán hasta los 815 millones de Euros, con un crecimiento del 12% respecto de 2009. Para dar una idea del coste de un despliegue, el envío de los 220 hombres recientemente aprobados que solo transportarán su equipamiento individual costará 27 millones de Euros. Este es el coste aproximado de cada rotación de material.

 

Por otra parte cada seis meses alrededor de un 10% de los vehículos deben ser repuestos y otro 10% es sometido a reparaciones mayores. Cada seis meses cinco helicópteros son desplegados y los replegados son sometidos a tareas de reparaciones que duran unos 4 meses. Solo para dar una idea entre la flota de 17 CH-47 Chinook, y alrededor de 45 Superpuma/cougar; unos 12 helicópteros están desplegados o parados como consecuencia de las operaciones en Afganistán; un 15% del total de la flota de helicópteros entre Ejército del Aire y Tierra. Los helicópteros están siendo sometidos a medidas de autoprotección y blindaje, ya que han sido los únicos que hasta ahora han volado sin protección balística.

 

Otro ratio interesante muestra como el ratio de coste medio por efectivo se ha incrementado de forma dramática en los últimos años de forma que en 2010 será de 236.000 Euros por efectivo medio desplegado año, frente a un coste inferior a los 200.000 euros en términos constantes 4 años atrás.

 

Finalmente indicar que para el año 2010, el presupuesto de misiones en el exterior supondrá casi un 11% del total del presupuesto del ministerio de Defensa. En términos relativos, un 3% de los efectivos medios desplegados absorberá un 11% del presupuesto; aunque no debe olvidarse que los salarios del personal desplegados así como otros gastos asociados no están incluidos en el presupuesto de estas operaciones.

 

La práctica habitual ha sido no incluir en los presupuestos generales del Estado dicha dotación que queda reducida a una insignificante cantidad que luego se amplía a mediados del ejercicio por un Acuerdo de Consejo de Ministros. Según el documento de presentación de los presupuestos la razón de ser de esta práctica es el carácter impredecible de la cuantía; afirmación que no se sostiene a la vista de la experiencia.

 

Según estos cálculos, en 2010, los gastos de operaciones en el exterior no presupuestados se comerán un tercio de los fondos que se obtendrán de los incrementos de impuestos que en teoría servirían para reducir el déficit, según explicó la vicepresidente en su comparecencia explicando los presupuestos.

 

Los costes de nuestro despliegue son en términos medios por efectivos muy similares a los norteamericanos y canadienses, ligeramente superiores a los británicos y muy superiores los de otros países. Esto se debe a tres factores principales; la retribución de nuestros efectivos desplegados es en proporción más elevada que la del resto y, similar a las tropas americanas, holandesas y canadienses. Nuestros costes operativos lógicamente son similares ya que las vías de transporte y abastecimiento son similares. Solamente para dar un dato la alimentación de nuestras tropas que se adjudica a la misma empresa sin ninguna publicidad supone en el total de las misiones 35 millones de Euros al año; solamente en Afganistán cuesta 11 millones de Euros anuales.

 

 

En los primeros despliegues y hasta el año 2008, el material desplegado por nuestras tropas además de su armamento personal eran vehículos de ruedas 6x6 BMR y helicópteros de transporte y evacuación aeromédica CH-47 y Superpuma, en un número medio de cinco unidades y desplegados básicamente en Herat. Simplemente por comparar con el despliegue efectivo con el que compartimos despliegue en el región Oeste; a raíz de las primeras experiencias de combate decidieron desplegar vehículos de combate acorazado Dardo; helicópteros de combate Mangusta (5) y vehículos Lince iguales a los adquiridos por España recientemente.

 

Los ataques con IEDs y minas; estas en muy menor escala  llevaron al gobierno a la adquisición de nuevos vehículos; Así se han adquirido 120 vehículos de 4 plazas Lince con un nivel de protección STANAG 2 y vehículos RG-31 de pelotón con un nivel de protección STANAG 3. Mientras que los primeros han demostrado toda su utilidad por su movilidad, que es mucho más clave en la protección que el blindaje en sí; los RG 31 están pendientes de desplegarse por problemas técnicos. Todos los informes recientes, especialmente americanos concluyen que este vehículo constituye un objetivo muy ambicioso por los talibanes por transportar un alto número de efectivos; fácil dada su escasa movilidad y sin protección contra los famosos RPG-7 de uso habitual por los talibanes o explosivos EPG, de los que recientemente se han encontrado diversos arsenales en la zona Oeste del país de procedencia iraní.

 

Asimismo se han dotado a los equipos de inhibidores de frecuencias, con una eficacia limitada dados los ingenios utilizados recientemente. Finalmente se adquirieron 4 vehículos aéreos no tripulados para tareas de vigilancia táctica; al perderse una unidad el gobierno decidió recientemente reemplazarla. A pesar del elevado número de horas que están volando, están dedicados básicamente a la vigilancia del perímetro de la base de Herat.

 

El déficit de helicópteros es una de las claves según todos los expertos que puede llevar a la derrota en Afganistán. A diferencia de la época de la invasión soviética, no se ha reportado que los talibanes dispongan de material antiaéreo, por lo que los helicópteros pueden operar con total libertad. Los helicópteros Apache de Estados Unidos, Holanda y Reino  Unido están volando 51 horas mensuales y son el principal elemento de escolta y protección; Para los españoles dicha cobertura es proporcionada por los helicópteros italianos.

 

España ha tenido desplegados este verano helicópteros Cougar que se han demostrado insuficientes para la misión. Así si estos helicópteros pueden llevar 14 efectivos en invierno, en verano solo pueden transportar a cuatro efectivos y no pueden operar después de las 7 de la mañana. Solo los helicópteros CH-47 han demostrado su capacidad operativa en todo tiempo y su capacidad para ser blindados protegiendo a los tripulantes.

 

En el informe de Mc Crystal queda perfectamente delimitado  que las tropas nos pueden quedarse para protegerse a sí mismas y que es necesario adoptar una estrategia de contrainsurgencia, asumiendo riesgos en las operaciones. Como dice el informe los talibanes no pueden derrotar a ISAF, pero si lo podemos hacer nosotros.

 

La estrategia a mi juicio pasaría por un mayor despliegue de unidades COIN; un soporte aéreo con helicópteros Tigre, sustituyendo los helicópteros superpuma por CH-47 con mayor capacidad de operar en todo tiempo. Estos escenario demuestran lo importante es que adquirir el material en función de las necesidades operativas en las que van a desenvolverse las operaciones, que no son muy diferentes que en España, y no por criterios de otra naturaleza.

 

Estados Unidos va a comenzar de inmediato a reemplazar los vehículos MRAP por los denominado MRAP-All Tactical Vehicle; con capacidad de protección frente a todas las amenazas, alta movilidad y menor capacidad. Mil vehículos van a ser reemplazados en los próximos dos años en este escenario. La adquisición de esos vehículos debería ser una prioridad así como dotar a los MRAP adquiridos de las mismas mejoras de protección que han realizado americanos y británicos incrementando la protección a nivel 4 y con protección contra EPG, IED de mayor velocidad y RPG-7.

 

 

El ministerio de Defensa español va a realizar una gran apuesta como ha afirmado la ministra para volver antes; cómo si ello dependiera del número de efectivos; la adopción de una estrategia de combate frente a los talibanes es la única vía al éxito de la misión.

Resulta esencial incrementar la capacidad del ejercito afgano que apenas dispone de material y falta de preparación; será necesaria una fuerte presencia en el futuro en entrenamiento y asistencia hasta que este ejerció que deberá alcanzar los 200.000 efectivos si desea tened un control sobre el territorio, y especialmente debe tener un importante elemento aéreo en un país tan montañoso y sin carreteras. España está patrocinando la creación de un batallón en Bagdhis donde hasta ahora la presencia afgana era policial; esta nueva unidad que tendrá su campamento al lado del español, complementará las acciones de nuestras tropas en la región y podrán adentrarse en la zona Norte/oeste de Bagdhis asegurando la carretera hacia el Norte que se ha convertido en dominio talibán. Asimismo, mantener abierta la carretera entre Qala i Naw y Herat constituye otro objetivo estratégico de primer orden; la presencia de grupos talibanes cercanos a la centena en los pasos angostos en las últimas semanas sugieren que nuevos ataques se producirán en las próximas semanas antes del paréntesis invernal

 

España debería disponer para la próxima primavera de los medios y estructuras operativas que permitan invertir la situación en un área que no es tan compleja como el sur y donde la mezcla tribal es mayor y pueden buscarse apoyos.

 

Según diversos informes los talibanes tienen una de sus mayores fuentes de financiación en los fondos occidentales para reconstrucción; las empresas afganas son autorizadas a trabajar con las tropas de ISAF y las ONGs si abonan un 10% de los ingresos a los talibanes o construyen determinadas instalaciones o adquieren equipos; los talibanes tienen uniformidad hasta en los vehículos que son adquiridos en grandes lotes, lo que muestra una estructura logística de cierta entidad.

 

En los últimos dos años se ha observado un incremento de la presencia talibán en las zonas donde las tareas de reconstrucción se han hecho más efectivas; de ahí que la contribución a la reconstrucción solo puede ser eficaz y no volverse contra nuestras tropas cuando los elementos talibanes hayan sido derrotados o al menos la población se sienta protegida por ISAF y el Ejército Afgano.

 

Los esfuerzos de reconstrucción debe centrarse más en actividades productivas; de nada sirve asfalta o llevar agua potable si después cuando se vayan las tropas no hay una actividad económica que las mantenga; de ahí que la potenciación de la agricultura y la búsqueda y explotación de recursos energéticos y minerales sea el principal objetivo de este esfuerzo.

 

El incremento de la actividad bélica en las zonas de influencia española, especialmente cuando los anuncios de salida del país son ya conocidos en todos los rincones del país, influirá de forma muy notable en los costes de la operación, que podría dispararse hasta los mil millones de Euros en 2011. Para el ministerio de Defensa se trata de un esfuerzo económico muy importante dadas las carencias de medios y recursos.

 

Los esfuerzos en la formación de un ejército afganos están siendo baldíos; solo resultan operativos las unidades procedentes de las tribus del Norte que combatieron a los talibanes; las nuevas unidades recién constituidas necesitan unos sueldos más dignos; hoy en día los militares afganos han pasado de ser los mejor pagados en el país a los peores debido a la inflación y los sueldos pagados en tareas de reconstrucción que multiplican por 5 la retribución de un soldado afgano.